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Los libros cuentan historias.

Pero los libros no serían libros sin páginas y letras

al igual que las historias no serían historias sin personajes ni sucesos.

El alma de la novela reside en el corazón del escritor, y después en el del lector.

El alma de la novela te hará volar. Con alas de magia. Con plumas de tinta.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Reseña de "El Retrato de Dorian Gray"

Título: El retrato de Dorian Gray

Título original: The picture of Dorian Gray

Autor: Oscar Wilde

Editorial: Amazon (Ebook Kindle) 

Nº de páginas: 264 (328KB)

Fecha de publicación: Junio de 1890 

ISBN: 9788481097801
"Lo único con valor en la vida es la belleza". El joven Dorian Gray hace suya esta máxima y desea con todas sus fuerzas permanecer siempre tan hermoso como se le ve en el retrato que le ha pintado su amigo Basil. Al poco tiempo descubre que aquello que podría marchitar su belleza -los pecados, la envidia, el odio y, sobre todo, el paso del tiempo- quedan reflejados en el cuadro, pero no hacen mella en su cuerpo. La vida de Dorian entra entonces en una espiral que sólo puede terminar en tragedia. 
Mi opinión:
Lo cierto es que cuando comencé este libro apenas sabía nada sobre su argumento, pero tenía una idea sobre lo que me podía esperar. Sin embargo, he de decir dos cosas: por un lado, que me ha sorprendido; y por otro, que me ha encantado y ha pasado a ser una de mis novelas favoritas.

Ambientado en el Londres victoriano (época a la que pertenecía el autor), El retrato de Dorian Gray nos cuenta una historia sobre la corrupción del alma y sus consecuencias. Siendo el núcleo de la novela un tema tan espinoso y oscuro, el libro puede parecernos, en un principio, algo siniestro, ya que pertenece, sin duda, al género gótico. Aprovecho este momento para añadir que ésta ha sido la primera obra gótica que he leído en mi vida y, contrariamente a lo que me podría haber imaginado, me ha gustado, probablemente porque, a pesar de lo oscuro del relato, el autor no insiste en hacerlo siniestro ni lo fuerza, dando como resultado un libro con un toque de terror gótico que caracteriza y ameniza la lectura.

Si para algo está escrita esta obra, es para reflexionar. Ya desde el principio el autor nos expone su filosofía, explicando su punto de vista sobre el arte y el valor de la belleza y la juventud. Son teorías muy complejas que requieren mucha reflexión y mucho esfuerzo para ser comprendidas completamente. De hecho, servidora está segura de no haber entendido absolutamente todo lo que Oscar Wilde querría haber transmitido (y me he prometido a mí misma que volveré a leerlo cuando sea mayor, porque estoy segura de que comprenderé más cosas). En resumen, éste es el punto fuerte de la novela en mi opinión, y la razón por la que me ha gustado tantísimo.

Dicho esto, puede parecer que toda esta filosofía haga de su lectura algo pesado, pero no es así. El autor nos captura con su prosa refinada y mordaz, haciendo que nos enganchemos y no podamos soltar el libro hasta el final. Los párrafos sobre valores podrían ralentizarle la lectura a más de uno, pero en mi opinión la llenan de variedad e interés.

Sin embargo, el ingenio de Oscar Wilde en ningún momento brilla tanto como cuando lo plasma en los personajes (sobre todo, en Lord Henry Wotton). El autor dota a cada personaje de una personalidad precisa y realista que encaja a la perfección con su entorno. Son personas muy trabajadas y verosímiles, enrevesados como sólo puede serlo un ser humano. Además, Wilde refleja con maestría la influencia que unos pueden tener en otros en la relación entre Lord Henry y Dorian Gray, y en menor medida entre Dorian y Basil, el pintor que le hace el retrato al joven.
Todo esto sucede en el corazón de la alta sociedad del Londres victoriano, aspecto que le da un mayor interés y juego a la historia.

En resumen, El retrato de Dorian Gray es una obra maestra del género gótico que nos mantiene en vilo a la vez que nos hace reflexionar profundamente sobre el valor del arte, la belleza y la juventud.


Sobre el autor: Oscar Wilde
1854-1900. Nacido en Dublín, Irlanda (que en aquella época pertenecía al Reino Unido), Oscar Wilde fue uno de los dramaturgos más destacados del Londres victoriano tardío, además de un gran escritor y poeta.
Hijo de exitosos intelectuales de Dublín, mostró su inteligencia desde edad temprana al adquirir fluidez en el francés y el alemán. Durante sus estudios, dio pruebas de ser un prominente clasicista, primero en Dublín y luego en Oxford; y se dio a conocer por su implicación en la creciente filosofía del esteticismo. También exploró profundamente el catolicismo −religión a la que se convirtió en su lecho de muerte−. Tras su paso por la universidad se trasladó a Londres, donde se movió en los círculos culturales y sociales de moda.
Como portavoz del esteticismo realizó varias actividades literarias: publicó un libro de poemas, dio conferencias en Estados Unidos y Canadá sobre el Renacimiento inglés y trabajó prolíficamente como periodista en Londres. Conocido por su ingenio mordaz, su vestir extravagante y su brillante conversación, Wilde se convirtió en una de las mayores personalidades de su tiempo.
En la década de 1890 refinó sus ideas sobre la supremacía del arte en una serie de diálogos y ensayos; e incorporó temas de decadencia, duplicidad y belleza en su única novela, El retrato de Dorian Gray. La oportunidad para desarrollar con precisión detalles estéticos y combinarlos con temas sociales lo indujo a escribir teatro, dando como resultado cuatro comedias de sociedad a principios de la década de 1890.
En el apogeo de su fama y éxito, mientras su obra maestra, La importancia de llamarse Ernesto, seguía representándose en el escenario, Wilde demandó al padre de su amante por difamación. Sin embargo, perdió el juicio y fue encarcelado por dos años, obligado a realizar trabajos forzados. Tras su liberación partió inmediatamente a Francia, donde escribió su última obra, La balada de la cárcel de Reading, un poema en conmemoración a los duros ritmos de la vida carcelaria. Murió indigente en París, a la edad de cuarenta y seis años.

Por si te interesa...
La obra de Oscar Wilde ha sido llevada al cine dos veces.
La primera adaptación, estrenada en 1945, tuvo como protagonistas a George Sanders (LORD HENRY WOTTON), Hurd Hatfield (DORIAN GRAY), Donna Reed (GLADYS HALLWARD), Lowell Gilmore (BASIL HALLWARD) y Angela Lansbury (SYBIL VANE).




La segunda adaptación, es mucho más reciente. Estrenada en 2009, tuvo como protagonistas a Colin Firth (LORD HENRY WOTTON), de películas como El Discurso del Rey o Love Actually; Ben Barnes (DORIAN GRAY), conocido por reencarnar al príncipe Caspian en la segunda entrega de Las Crónicas de Narnia; Ben Chaplin (BASIL HALLWARD) y Rachel Hurd-Wood (SYBIL VANE), de Solomon Kane.

Podéis ver el tráiler de la película aquí.

3 comentarios:

  1. Vaya vaya, Bethie, tu reseña respira la misma admiración justificada que nuestra conversación telefónica sobre la novela que espero leer de un tiempo a esta parte ;)
    Lo que ocurre es que, al haber sido escrita con tiempo y estilo, tu crítica rezuma muchísimo más cuidado y es diáfana hasta el hartazgo. En resumen, que es probablemente una de las mejores reseñas que te he leído; no sé si en honor a la abundancia de reflexiones de este libro que te ha conquistado, pero des de luego está muy bien argumentada y cubre cada aspecto con cada palabra y expresión correctas.
    Lo único que me ha chirriado, y aun así sigue sigue siendo una crítica inigualable: cuando explicas el género gótico de la novela parece que te repitas en tus justificaciones.

    En cuanto al libro, ya he comentado que deseo leerlo; cualquier duda o prejuicio que pudiera tener respecto a este, se han esfumado gracias a tu reseña. Lo que pasa es que esperaré, para tener más experiencia y conocimiento y entender y disfrutar la complicada trama mucho mejor de lo que lo haría ahora (o eso espero xDD).

    Eso sí, debo comentar que la biografía tan larga de Oscar Wilde me ha llamado la atención: estaba convencida de que murió de pena de muerte por homosexualidad, sodomía y otras tendencias sexuales tan mal juzgadas en aquella época. Porque su amante citado sí era un hombre, ¿verdad? ^^

    Besos,
    Sawako :3

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  2. Aun no he visto la película, porque tengo pensado leer el libro que me llama mucho la atención. Además, después de ver tu opinión tan buena me anima a leerlo lo antes posible.
    Besos :)

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  3. Me lo quiero leer desde hace mucho, pero con esta reseña va a ser el próximo que me lleve bajo la almohada, ¡muahahahahaha! En cuanto termine con la saga Millenium me voy de viaje al Londres victoriano.

    Besines, Beth :3

    PD: Estoy ausente por culpa de las pendientes, pero desde el viernes 21 volveré a dar guerra, ¡muahahaha... há!

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